Mientras en la ONU se monta una nueva campaña internacional de acoso contra Israel, el Gobernador Rick Perry ha participado en un acto del Likud en un hotel cerca de Union Square, en Nueva York.
El candidato ha prometido apoyo a Israel y ha responsabilizado a Obama y sus políticas de presión sobre Israel de la decisión de los árabes de Palestina de pedir el estatuto de Estado. Ha descrito la actual política del gobierno hacia Israel, de pedir el retroceso a las fronteras de 1967, como "insultante, ingenua, arrogante, equivocada y peligrosa."
"Estamos indignados de que ciertos líderes de Oriente Medio hayan desechado el principio de las negociaciones directas entre la nación soberana de Israel y el liderazgo palestino. Y estamos igualmente indignados de que la política de apaciguamiento para Oriente Medio de la Administración Obama haya alentado ese acto ominoso de mala fe."
Le acompañaba el recién elegido Congresista Bob Turner, del 9º Distrito de NY.
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