jueves, 6 de septiembre de 2012

Dios y Jerusalén desatan el conflicto en Charlotte

Ayer se vivió un momento embarazoso en la convención demócrata.

Fue durante una votación para reinsertar las palabras "Dios" y "Jerusalén" en el programa electoral del partido. Hace unos días, las fuerzas más radicales de Obama en el Comité del Programa habían conseguido eliminar la palabra "Dios" del programa del Partido Demócrata por primera vez, y habían hecho desaparecer cualquier referencia a "Jerusalén" como capital del estado de Israel. Pero ante la tormenta de críticas desatada y la amenaza de algunos líderes judíos de retirar su apoyo al partido, Chicago ordenó someter a la votación de los delegados un cambio en el programa para volver a incluir esos términos.

El presidente de la convención, Antonio Villaraigosa, intentó ayer por tres veces asegurar los dos tercios necesarios para aprobar el cambio en una votación a voz alzada. Los delegados votaron las tres veces claramente en contra del cambio (no hubo dos tercios a favor, más bien un 50-50), pero Villaraigosa declaró aprobada la moción. Algunos delegados lo abuchearon.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Menuda chapuzada de sistema. Una cacicada

Antxon G. dijo...

La culpa es de la televisión...

Anónimo dijo...

Por?

Antxon G. dijo...

Porque tienen miedo de mostrar hasta el más mínimo desacuerdo en un evento televisado.

Si hubieran hecho la votación delegación por delegación, y el resultado hubiese sido el no deseado, ese hubiera sido el tema que hoy dominaría los titulares, y no el discurso de Clinton.

Anónimo dijo...

Pues hay que ser demócratas, y romper tabúes. Parece un país demasiado tendente a congelarse en el tiempo. No avanzan hacia ningún sitio en particular. Están girando en círculos constantemente.

Se vota, y se acata la decisión.

La capital de Israel es Tel Aviv.

Hay que ir quitándole el chupete al niño de una vez, porque cuando mimas a un niño demasiado se vuelve un fascista de mayor.