Su gira de tres días por el Medio Oeste nos ha permitido observar mejor el pelo encanecido del Presidente. No quiere ocultar el paso del tiempo, incluso se da el gusto de hacer chistes y bromas en las recaudaciones de fondos y en los encuentros con la prensa.
Parece que él o sus asesores de imagen, yo diría que sus asesores porque este es un presidente entregado a los profesionales que lo rodean, han renunciado a utilizar el tinte, al menos parcialmente, para mantener joven su aspecto, tal vez en la esperanza de que esto le otorgue una imagen de señor más juicioso que pueda ser útil para enfrentar la opinión cada vez más generalizada de que carece de madurez para ejercer la Presidencia.
Pero también puede ser el símil no expresado del desgaste de su imagen vigorosa de 2008 y de la decadencia de su Presidencia, del fin de las ilusiones. Y un Obama más real y pesimista, más gris, puede perder sus principales (algunos dirán que únicas) virtudes.
2 comentarios:
A este paso dejara de ser el primer Presidente negro jejeje. Ya en serio, parece que su gira ha sido decepcionante. Ni ha conseguido empatizar con votantes potenciales ni mejorar su imagen.
Un saludo:
Cornelio Sila
No diría que la gira ha sido decepcionante. No ha estado mal. Aunque tampoco tenía más pretensión que el alejarlo un poco del ambiente tóxico de Washington DC.
Técnicamente no es el primer Presidente negro. Es el primer Presidente mulato. Su vínculo con América es una madre blanca. Y lo negro le viene del extranjero.
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