En su primer acto en solitario en la feria estatal de Iowa, en Des Moines, el Congresista Paul Ryan ha hablado ante 3,000 seguidores y un pequeño pero ruidoso grupo de "revientamítines," incluida una gorda que ha intentado trepar al escenario y un señor de pelo blanco que no ha callado en todo el evento. El candidato ha sabido salir al paso con naturalidad, diciendo que no deben ser de Iowa o Wisconsin, y dando un encendido discurso sobre empleos.
Me encantan estos mítines caóticos que escapan del control de las campañas y que los nuevos canales de comunicación y las nuevas exigencias de seguridad han matado. Recuerdan a otros tiempos, cuando Teddy Roosevelt se enredaba en interminables discusiones con individuos del público.
En este otro video tomado desde otra posición podéis ver todo el revuelo que había delante de él mientras hablaba.
Durante la campaña para el Caucus de Iowa, el verano del año pasado, Romney ya protagonizó en ese mismo lugar uno de los momentos más genuinos de esta campaña.
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